En este artículo, “El Ginkgo biloba: curiosidades sobre un árbol fascinante”, exploraremos los increíbles secretos y características de uno de mis árboles preferidos. El Ginkgo biloba, también conocido como el árbol de los templos, de los 40 escudos o el nogal de Japón, es una especie milenaria con una historia y simbolismo únicos que lo hacen verdaderamente especial.
Acompáñame en este recorrido por sus propiedades medicinales, su resistencia asombrosa, su influencia en las artes y mucho más. ¡Descubre por qué el Ginkgo ha cautivado mi corazón y es un árbol tan excepcional en la naturaleza!
Es una de las plantas más antiguas del planeta
El Ginkgo es uno de los árboles más antiguos del mundo, con una historia que se remonta a más de 200 millones de años y que, en su momento, se extendía por todo el planeta. Ha sobrevivido a múltiples eventos de extinción masiva y ha sido testigo de la evolución de muchas especies de animales y plantas.
Aparentemente, el Ginkgo es más parecido a una conífera que a un árbol caducifolio de hoja ancha, su porte es triangular como un abeto y sus hojas parecen muchas acículas unidas en una hoja. Pero no lo es, de hecho es el último miembro vivo de su género, y no tiene parientes vivos cercanos.
Puede ser la planta de semillas viviente más antigua y se le considera el único eslabón viviente entre las plantas inferiores y las superiores, entre los helechos y las coníferas. Es un enlace importante entre el pasado y el presente de nuestro planeta.

Sus hojas son únicas
¿Sabías que las hojas del Ginkgo son únicas por su estructura de nervios radiales y su forma de abanico? Si te fijas, las hojas de las demás especies tienen formas muy diversas, pero siempre con un nervio central del que salen todos los demás. Las de ginkgo tienen una hendidura en el centro que la divide en dos lóbulos haciéndolas parecer alas de mariposa. De ahí viene el nombre biloba, “bis” (dos) “loba” (lóbulos).
En otoño, el color verde brillante de las hojas del Ginkgo pasa a un precioso tono dorado antes de caer girando como bailarinas. Se dice que si coges una hoja de ginkgo en el aire antes de tocar la tierra, tendrás buena suerte. Las hojas permanecen en el árbol hasta bien entrada la estación y, entonces, pueden caer todas rápidamente en uno o pocos días o incluso en 1 ó 2 horas en lo que se conoce como “lluvia de hojas”. Un espectáculo impresionante.

Frutos malolientes
El Ginkgo es una planta maravillosa, pero sus frutos son realmente desagradables. Después de la floración primaveral, comienzan a formarse los frutos que caen en otoño. Cuando se pudren y empiezan a fermentarse en el suelo, desprenden un olor tan apestoso que quien lo ha olido, no lo olvida.
Este hedor es debido a la presencia de ácido butírico en su cubierta carnosa exterior. El objetivo biológico de esta fragancia desagradable es, en realidad, un mecanismo de defensa de la planta. Al liberar un olor fuerte y poco atractivo, el ginkgo busca disuadir a los animales y depredadores de consumir sus semillas. De esta manera, asegura que sus semillas puedan caer al suelo y germinar para propagar la especie sin ser consumidas por herbívoros o animales que normalmente se alimentarían de ellas. Es un mecanismo natural eficaz para la supervivencia de la especie en la naturaleza.
Los frutos sólo se encuentran en los árboles hembra, así que en los parques y jardines suelen plantarse ejemplares macho para evitar estos inconvenientes.
Semillas deliciosas
En cambio, las semillas de Ginkgo biloba son consideradas un manjar y se utilizan en la cocina tradicional china y japonesa para hacer postres y aperitivos. Tienen un sabor dulce que se parece a la castaña y una textura suave y tierna. Hay que tener en cuenta que se deben pelar y cocinar adecuadamente porque crudas son tóxicas. Tradicionalmente, los frutos se recolectan y se sumergen en agua para facilitar la descomposición de la cubierta exterior de la semilla. Después se lavan y se dejan secar al sol.
Una de las formas más populares de disfrutar las semillas de ginkgo es asándolas y salteándolas con especias y condimentos. El resultado es un delicioso aperitivo crujiente y sabroso que se sirve en reuniones familiares y celebraciones festivas.
Otra forma común de utilizar las semillas de ginkgo en la cocina asiática es en sopas y caldos. Las semillas se hierven junto con otros ingredientes, como carnes, verduras y hierbas aromáticas, para crear platos reconfortantes y llenos de sabor.
Súper árbol
El Ginkgo biloba es verdaderamente fascinante por su excepcional capacidad para resistir diversas amenazas. Es famoso por su asombrosa longevidad y la particularidad de no envejecer, gracias a que posee un súper sistema de defensa que lo hace casi inmortal. Es capaz de sobrevivir en las condiciones más adversas.
En primer lugar, es conocido por su resistencia a la contaminación. Este árbol puede prosperar en entornos urbanos difíciles donde otros árboles podrían tener dificultades para sobrevivir debido a la mala calidad del aire y la presencia de polución. Esto ha hecho que se plante en muchas ciudades para purificar el aire y reducir los niveles de contaminación.
A diferencia de muchos otros árboles que pueden ser afectados por diversas plagas y enfermedades, el Ginkgo muestra una notable resistencia y rara vez sufre daños significativos por estas causas. Su capacidad para lidiar con estas amenazas lo convierte en una opción popular para la ornamentación de calles y parques en áreas urbanas.
Se cree que soporta los incendios y los rayos porque el tronco y las hojas segregan una savia que puede actuar como un retardante del fuego.
Pero sin duda, uno de los aspectos más asombrosos del Ginkgo biloba es su tolerancia a la radiación nuclear. Es increíble cómo este árbol sobrevivió a los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki en 1945. Volvió a brotar la primavera siguiente y continuó creciendo sin problemas a pesar de la alta radiación en esas áreas. Investigaciones científicas están estudiando esta capacidad para comprender cómo el Ginkgo puede resistir los efectos de la radiación, y aplicarlo en la protección de la vida vegetal y humana en situaciones de desastres nucleares.


Propiedades medicinales
Durante siglos, se ha utilizado el Ginkgo en la medicina tradicional china por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Es conocido por proteger de los daños causados por los radicales libres, mejorar la circulación sanguínea, reducir la inflamación y mejorar la función cognitiva, la memoria y la concentración.
Las hojas de Ginkgo se utilizan en cosméticos para el cuidado de la piel y champú. Son también usadas como fertilizante y como insecticida.
Hace poco he descubierto que las hojas de Ginkgo son perfectas como marcapáginas, porque, además de ser preciosas, tienen propiedades insecticidas que protegen los libros de las plagas de insectos que los estropean.
Un árbol sagrado
El Ginkgo es un árbol sagrado en muchas culturas y se considera un símbolo de longevidad, resistencia y esperanza.
En China y Japón, el Ginkgo se ha utilizado tradicionalmente en ceremonias religiosas, y se cree que tiene poderes curativos y fortalecedores. Algunos ejemplares de Ginkgo que aún podemos ver, fueron plantados en templos y jardines sagrados hace muchos siglos y llegan a tener más de 1.000 años de edad.
También representa la dualidad del amor, de los opuestos, el principio masculino y femenino, ya que sus hojas tienen forma de corazón pero se dividen en dos lóbulos.
Inspiración artística
El Ginkgo biloba ha sido una fuente de inspiración en las artes a lo largo de la historia. Su belleza, singularidad y simbolismo han inspirado a artistas y diseñadores a capturar sus formas en una variedad de obras creativas.
Tanto en Japón como en China el Ginkgo biloba ha jugado un papel significativo en las artes, gracias a su profundo valor cultural y simbólico. En las pinturas tradicionales japonesas, en los diseños de bordados, en esculturas… las hojas de ginkgo son frecuentemente representadas con su forma de abanico y color dorado otoñal, a menudo utilizadas para simbolizar la transición de las estaciones y la naturaleza efímera de la vida.
Johann Wolfgang von Goethe escribió su Poema a las hojas del Ginkgo inspirada en este árbol. En esta breve y emotiva composición y a través de la metáfora del árbol con hojas en forma de abanico, Goethe reflexiona sobre la dualidad de los sentimientos humanos, donde la alegría y el dolor coexisten. Expresa la complejidad emocional de la vida y la conexión con la naturaleza como fuente de inspiración literaria.
Durante finales del siglo XIX, el movimiento Art Nouveau, también conocido como Modernismo, Jugendstil o Sezession, comenzó a integrar la naturaleza en sus creaciones. Muy influenciado por el japonismo, el Ginkgo biloba se convirtió en uno de los motivos predilectos. Este movimiento artístico, con epicentros en Francia, Alemania, Bohemia y Bélgica, apreció la singular belleza de las ramas, hojas y semillas de ginkgo y las representó en motivos arquitectónicos, muebles, joyas y otras obras de arte.
¿Te has fijado en que el peinado de los luchadores de Sumo tiene forma de hoja de Ginkgo? Se llama “oichomage” y es una tradición única y emblemática en la cultura japonesa. Este estilo de coleta cuidadosamente plegada en un semicírculo, imita la hoja del ginkgo, añadiendo un toque distintivo y elegante a la apariencia de los luchadores, además de transmitirle simbólicamente toda la fuerza y resistencia de este árbol. Es un atributo de su estatus dentro del deporte y sólo saben hacerlo unos especialistas llamados “tokoyama“.
La huella del Ginkgo
Y cómo no, el Ginkgo también ha sido mi musa en el diseño de joyas. Mi Colección Herbario comenzó con el Colgante de hoja de Ginkgo y desde ahí he creado de todo: pendientes, anillos, gemelos, llaveros y pulseras. También me he atrevido con unos Exlibris botánicos muy bonitos con forma de las hojas de este árbol. Y por lo que he podido comprobar, ¡no soy la única enamorada de estas piezas! Las joyas inspiradas en el Ginkgo no sólo son las más populares y las que más elegís, sino que también se han convertido en vuestros talismanes para esos instantes significativos y mágicos de vuestra vida.
Y para que puedas comprobar la increíble presencia de este árbol, con cada joya de Ginkgo que compres, te regalamos las semillas para que puedas sembrarlo.

Precioso!!!!!
¡Me alegra que te haya gustado!
Lo descubrí gracias a ti, y sus hojas me tienen enamorada. Tengo contratados todos los Ginkgo biloba de mi ciudad. Gracias!
Controlados, no contratados