Día Europeo de los Parques Nacionales

Coincidiendo con el Día Europeo de los Parques Nacionales, quiero llevarte de paseo por la Sierra de Hoyo de Manzanares, mi pueblo. Pertenece al Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, el más antiguo de la Comunidad de Madrid.

Todo nuestro entorno está protegido. Tenemos la suerte de que en nuestra sierra habiten aves tan vulnerables como el buitre común y al águila imperial. Cada vez se ven más jabalíes y algún que otro zorro asustadizo. Últimamente también aparecen, casi de forma mágica, algunos ciervos solitarios coincidiendo con la salida del sol.

La Ruta de las Cascadas

Hoy vamos a hacer la Ruta de las Cascadas. Cuando éramos pequeños, ésta era nuestra excursión favorita, nos parecía toda una aventura llegar hasta allí con nuestras mochilas y bañarnos en el riachuelo.

Ahora me sigue gustando mucho porque es un camino muy sencillo, en el que suelo recoger hojas y ramitas que me sirven de inspiración para mis joyas.

El itinerario

La distancia es de 7,6 km de ida y vuelta que se recorren en unas 2 ó 3 horas, dependiendo de lo que te entretengas. En general es un camino muy accesible, excepto por alguna zona con mucha pendiente. Hay partes en las que las lluvias han formado torrenteras, que erosionan la tierra de forma irregular y están más tortuosas.

Salimos desde la Plaza Mayor por la Av. de la Paloma hasta encontrarnos con la plaza de toros. Tomamos la calle de la derecha entre las urbanizaciones La Orotava y El Picazo hasta llegar a rotonda de Ruiz Jiménez. Subimos por la pronunciada pendiente de la calle Camino de Villalba hasta donde acaba el asfalto y vemos un depósito de agua. Este trayecto solemos hacerlo en coche y lo aparcamos al lado del depósito.

Ésta es la mejor época para pasear por nuestra sierra. La explosión de colores que nos ofrecen las flores nos acompaña durante todo el camino. Además, en primavera es cuando más agua lleva la cascada y mejor se disfruta.

Avanzamos por un camino ancho por la ladera de los Picazos hasta llegar a una bifurcación con un cartel del Canal de Isabel II. Es una lástima porque, en este punto, la canalización del Canal ha partido una roca inmensa por la mitad y ha cambiado por completo el paisaje.

Podemos bajar por la roca que es más corto, pero está muy resbaladiza por la arena, así que te recomiendo que tomes la vereda de la derecha y después la de la izquierda en la siguiente ramificación.

Bajando por un terreno pedregoso vamos dejando los Picazos atrás. Llegamos a una barrera metálica que impide el paso a vehículos motorizados pero que podemos pasar caminando. Justo antes de llegar a este punto hay unas cuantas colmenas de abejas, así que es recomendable ir tranquilos y no hacer demasiado ruido para no molestarlas.

Continuamos por una pista ancha, disfrutando del paisaje de encinas salpicado de jaras, torviscos, tomillos y cantueso. De vez en cuando aparece un enebro solitario ente las rocas de granito.

En el siguiente cruce, descendemos por la pista de la izquierda pasando por debajo de la línea de alta tensión. Al llegar a un bosquete de pinos, tomamos el camino de la derecha, atravesando un arroyo estacional con chopos, olmos y zarzamoras.

Dejando atrás una zona de tierra roja y tras una empinada subida, tomamos el camino de la izquierda pasando por una caseta del Canal. Bajando por una fuerte pendiente llegamos a la Cascada del Covacho. Si no temes al frío y hace un buen día, puedes mojar los pies en su pequeña poza de aguas cristalinas.

Nosotros normalmente aprovechamos para comer en la mesa con bancos de piedra que hay colocada al lado de la cascada. Es una zona agradable donde puedes encontrar una sombra donde dormitar un rato o jugar en las orillas del arroyo con los niños. Puedes seguir el paseo río abajo y verás un puentecito con un mini salto de agua.

Para la vuelta hay que desandar el camino.

¿Os gusta que os descubra nuevas rutas de senderismo? En esta sección de paseos caminaremos juntos por los paisajes que me entusiasman.